Compañeras de trabajo almorzando

Qué es la inteligencia social

25 Abril 2019

Cuando las personas hablan de inteligencia, generalmente se refieren al tipo de habilidades duras: resolución de problemas, habilidades verbales, uso de la lógica o habilidad numérica. Pero cuando se trata de las llamadas habilidades “blandas”, como la comprensión de roles sociales, la lectura de emociones, la comprensión de relaciones o la escucha efectiva, rara vez las vemos como parte de la inteligencia. Y aunque las habilidades duras son muy importantes, son las blandas las que nos ayudan a mantener amistades, estar satisfechos en el trabajo o simplemente encontrar la felicidad en la vida.

Dado que estas habilidades, a las que también llamamos inteligencia social, a menudo se descuidan en las escuelas, a pesar de una gran cantidad de investigaciones que revelan sus beneficios innegables.


Inteligencia social

Las habilidades de inteligencia social son algo que cualquiera puede aprender. No dependen de los genes ni de la biología, aunque algunas personas pueden ser más susceptibles que otras a adquirirlas. Hoy podemos decir que es la capacidad de leer y reaccionar adecuadamente a las señales sociales, monitorear, comprender y manejar las propias emociones y encajar en una variedad de contextos sociales.


Desarrollo de la inteligencia social

Como adultos, la mayoría de nosotros desarrollamos estas habilidades hasta cierto punto. Es posible que tengamos una idea amplia de lo que significa ser socialmente hábil, pero diferimos en nuestra capacidad para cumplir con las reglas de la vida social y navegar por ellas. Los niños pueden comprender señales sociales complejas y comprender las intenciones de los demás. A medida que envejecemos, nuestro entorno social se vuelve más complejo y exigente, y requiere un conjunto sofisticado de habilidades y destrezas que para la mayoría de las personas no surgen de forma natural, sino que necesitan ser enseñadas. Como adultos, nos volvemos responsables y capaces de adquirir nuevas habilidades sociales, y podemos beneficiarnos significativamente al hacerlo.

Beneficios de desarrollarla

Mucha gente piensa que la inteligencia social es algo que simplemente “viene a ti”. Dado que no está directamente asociado con las ganancias y el progreso financiero, su importancia y sus beneficios se escapan fácilmente de nuestra atención. Desarrollar la inteligencia social tiene muchos beneficios para nuestro bienestar social, emocional e incluso físico. Aquí les decimos algunos:

  • Adaptación al cambio: cuanto más logre desarrollar su inteligencia social, más hábil se volverá para manejar entornos sociales complejos y cambiantes, así como sus emociones.
  • Bienestar personal: dado que la inteligencia social tiene mucho que ver con la comprensión de la comunicación en un subnivel, la decodificación de señales emocionales y la comprensión de nuestras propias emociones y las de los demás, nos brinda herramientas para lograr mayores niveles de bienestar personal y emocional.
  • Éxito económico: La adaptabilidad en el lugar de trabajo, la autorregulación emocional, la comprensión de las emociones complejas de otras personas, la construcción de relaciones fructíferas, el trabajo en equipo, junto con una variedad de habilidades y rasgos directamente asociados con la productividad, pueden desempeñar un papel crucial cuando se trata del éxito en el trabajo.