¿Qué sería de las empresas sin sus clientes?
Desarrollar estrategias de mercado, crear la imagen corporativa, producir un producto de calidad y enfocarse con disciplina al trabajo son elementos esenciales para el fortalecimiento de una empresa, pero el cliente será el destinatario de esos esfuerzos.
Importancia de la atención al cliente
Cuando creamos nuestra imagen corporativa, lo que estamos haciendo en realidad es vender una expectativa; lo hacemos para atraer a potenciales consumidores, pero luego el trabajo más duro será cumplir con esa expectativa y satisfacerla.
Allí radica la importancia de perseguir la excelencia. Esto tiene que ver con la manera en la que se presta el servicio pero no es el servicio en sí mismo: se debe poder enamorar al cliente.
Una empresa puede prestar un servicio de alta calidad, pero debe transmitirlo a sus usuarios, estableciendo una conexión humana que beneficiará a la percepción del mismo. Nuestros clientes confían en nosotros y nos prefieren en la medida en que los hagamos sentir importantes, escuchados y satisfechos.
La atención al cliente es la encargada de humanizar a la empresa, estableciendo una íntima relación con sus clientes que promueve la fidelidad y lealtad entre ambos.

Factores aplicados para alcanzar la excelencia en la atención al cliente
Sociabilidad
La atención al cliente requiere la capacidad de interrelacionarse con las personas, saber entablar una conversación amigable y demostrar tener un genuino interés en las personas.
Comunicación clara y directa
Se debe establecer una sana comunicación con nuestros clientes, donde se tomen en cuenta las fortalezas de la empresa y los beneficios que se puede ofrecer en cada caso.
Honestidad
Nunca debemos engañar a un cliente. Recuerda siempre que la expectativa que le vendes debe ser cumplida a cabalidad. Un cliente decepcionado es un cliente perdido.
Conocimiento del cliente
Conoce a tu cliente, mantente informado sobre sus actividades y gustos. Anticiparse a lo que quiere el cliente y ser proactivo puede darte una ventaja frente a otras empresas que ofrezcan el mismo servicio.
Saber escuchar
Es sumamente importante que estemos atentos: los usuarios serán el termómetro que mide la excelencia de nuestro servicio y en consecuencia, la salud de nuestra empresa. Asegúrate de siempre escuchar sus sugerencias y quejas.
Se creativo y efectivo
Preséntale a tu consumidor soluciones novedosas y de una manera rápida y efectiva. Hazle sentir que la satisfacción de sus necesidades es tu prioridad.
Busca las respuestas
Además de saber escuchar muchas veces tendremos que salir a buscar las respuestas que necesitamos de nuestros clientes para el mejoramiento del servicio. Muchas veces no saben bien lo que quieren, así que investiga y ofrécele soluciones a inquietudes que ni él sabe que tiene.
De lo que se trata es de potenciar la calidad de nuestros servicios a través del desarrollo de una relación empresa-cliente, provechosa y duradera.