Hay talentos ocultos entre los empleados que pueden ser aprovechados por una empresa. Por eso, el reto de las gerencias de recursos humanos es mantenerse atento ante el dinamismo que hace del grupo de trabajadores una entidad que cambia constantemente. Hay personas que nacen con una capacidad indiscutible para ciertas actividades, con habilidades que se les hacen mucho más fácil que a otras. Pero también hay destrezas y conocimiento que se aprenden y desarrollan gracias a la práctica disciplinada y constante estudio. Toda compañía que desee aprovechar ese talento, es decir, la aptitud y pericia para determinadas actividades, debe definir qué necesita la organización de sus empleados para potenciar determinadas tareas.
Identifica los objetivos
La gerencia de recursos humanos debe determinar si el colaborador es proactivo, organizado, creativo, leal, toma iniciativas y qué tan provechoso es su potencial. Desarrollar las habilidades debe ser visto como una gran ventaja. Para esto, es fundamental permitir que los colaboradores crezcan en cuanto a sus habilidades y conocimiento. Una vez identificados los objetivos, son necesarias las pruebas para conocer las potencialidades de cada trabajador. Muchas firmas recurren a los llamados
procesos de evaluación situacional. Estos consisten en una simulación de cómo sería el desenvolvimiento de una persona ante una situación que deberán enfrentar en el puesto en el que fueron seleccionados. También es importante que haya un plan personalizado para estructurar metas, incentivos y formación de ser necesario. Concéntrese en los resultados de sus empleados, en lugar de sus procesos y la forma en que obtienen esos resultados. Al brindarle al personal flexibilidad y autonomía en su trabajos se sentirán valorados y respetados. Cuanto mayor sea su satisfacción laboral, mayor será la productividad de su organización. Para aprovechar todavía más el talento, es fundamental que el empleado se sienta
motivado, valorado y respetado en la organización. De lo contrario, todas esas aptitudes serán desaprovechadas por la falta de motivación. Hay expertos que recomiendan hacer un estudio del entorno en el que se desarrolla cada individuo en interés. De ahí la importancia de mantener un ambiente que colabore en la dinámica de trabajo, que haga sentir a la persona cómoda y estimulada para trabajar por los propósitos trazados. Es imprescindible premiar el talento.